La capa de ozono ha empezado a recuperarse
¡Buenas noticias! Por primera vez, desde el año 2.000, la capa de ozono se ha visto reducida en 4 millones de kilómetros cuadrados. Los científicos, por tanto, habrían obtenido pruebas evidentes de que el agujero de la capa de ozono estaría disminuyendo tras más de 15 años de notables aumentos.
En el año 2.000 este agujero alcanzó su máximo histórico, 25 millones de kilómetros cuadrados, por lo que parece que los diferentes protocolos y prohibiciones de emisiones de gases tóxicos están dando sus frutos.
Las causas de la destrucción de la capa de ozono son claras: la emisión de gases CFC (clorofluorocarbonatos), presentes en aerosoles, aires acondicionados y la mayoría de productos de nuestra vida cotidiana, estaban acabando con esta capa tan necesaria para la vida en La Tierra. Por este motivo, en 1987 se estableció el Protocolo de Montreal mediante el que se prohibía la utilización de este tipo de gases y con el que se pretendía evitar casos de cáncer de piel y enfermedades respiratorias.
Como consecuencia de este protocolo, y del compromiso de todos los países de reducir emisiones y ser más considerados con el medio ambiente, el agujero se está reduciendo más de lo esperado y, de seguir así, se podría decir que en en el año 2.050 podría estar eliminado del todo.
Sin embargo también hay voces escépticas ante tal hecho, que aseguran que si no se combate el cambio climático, la capa de ozono no podrá salvar el planeta.
Aún así, parece que vamos por el buen camino y se está constatando que todo esfuerzo tiene su recompensa, por lo que si todos los países del mundo trabajan juntos para combatir el cambio climático, dejaremos un buen legado a las generaciones futuras.