INTERVIDA recuerda que 2,4 millones de niños trabajan en Centroamérica, de los que el 43,5% no asiste a la escuela
Madrid (26/07/2006). En Centroamérica y República Dominicana, existen más de 2,4 millones de niños entre 5 y 17 años trabajando, de los que el 40% lo hace por debajo de la edad mínima establecida por las legislaciones nacionales (15 años en Costa Rica y 14 años para el resto de países). Además, el 43,5% de los niños trabajadores no asiste a la escuela, lo que evidencia grandes brechas entre los niños que trabajan y los que no, ya que el 84% de los que no trabajan acuden a la escuela. Todos estos datos se recogen en diversos análisis realizados en la región por la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La incidencia del trabajo infantil es mayor a medida que aumenta la edad. Así, en la región centroamericana el 10,8% de los niños trabajadores tiene entre 5 y 9 años; el 43,8% tiene entre 10 y 14 años; y el 45,5% corresponde a adolescentes entre los 15 y 17 años. También hay mayor número de niños que de niñas trabajando y el trabajo infantil predomina en las zonas rurales. De hecho, la mitad de la niñez trabajadora en Guatemala, Nicaragua y El Salvador está ocupada en el sector agrícola, con un promedio de 34 horas semanales trabajadas.
De los 2,4 millones de niños trabajadores que hay en Centroamérica, aproximadamente el 80% se encuentra en lo que se denomina trabajo infantil por abolir, no sólo por la edad y por el número de horas dedicadas, sino también porque se ven afectados aspectos importantes del niño como su educación, salud y desarrollo físico y mental.
Del mismo modo que hay una clara relación entre trabajo infantil y escolaridad, también la hay entre trabajo infantil y pobreza. En muchas ocasiones, los padres de familia ponen a trabajar a sus hijos para que ayuden a la economía familiar y valoran más este aporte que su educación. No obstante, el trabajo infantil también es más frecuente en los países con más desigualdades económicas. Por ejemplo, en El Salvador y Guatemala, el 10% más rico de la población recibe un porcentaje del ingreso hasta 30 veces mayor que el 10% más pobre, mientras que en Nicaragua el 10% más rico absorbe un porcentaje de ingresos cerca de 70 veces mayor que los más pobres.
INTERVIDA ha apoyado en Guatemala diferentes iniciativas para combatir el trabajo infantil, como la `Campaña Nacional para la Ratificación del Convenio 182´ organizada por la OIT en 2003. Además, en este país y en El Salvador, se incide en la difusión de los derechos de la niñez entre niños, padres y maestros. Paralelamente, la organización realiza acciones de apoyo al niño y a la familia encaminadas a lograr la permanencia de los hijos en la escuela y evitar el abandono escolar. Entre estas acciones destacan las becas escolares y la entrega de útiles escolares para que las familias no tengan que costearlos.
En Guatemala, el proyecto de permanencia escolar está beneficiando en la actualidad a cerca de 334.000 alumnos. Al mismo tiempo, se está trabajando en otro proyecto de participación comunitaria escolar con más de 26.400 padres y madres de familia.
En El Salvador, los niños, docentes y familias son también los protagonistas del `Proyecto Derechos y Responsabilidades de la Niñez´. En 45 escuelas se trabaja con 7.461 maestros y alumnos para que practiquen de manera fácil y lúdica sus derechos y responsabilidades, teniendo como base la Convención de los Derechos del Niño de Naciones Unidas.