Intervida apuesta por impulsar la Educación para el Desarrollo como una de las líneas estratégicas de su labor

Madrid (03/04/2008). Dentro de su nueva línea estratégica, INTERVIDA es consciente de que uno de los pilares del Tercer Sector es la Educación para el Desarrollo, por lo que se ha marcado como objetivo y reto impulsar la Educación para el Desarrollo. En esta línea, se ha elaborado un documento para clarificar los límites, objetivos y metodologías propios de la Educación para el Desarrollo como paso previo a la elaboración de un marco teórico que encuadre las acciones de la organización en este campo. Este documento se puede consultar en www.intervida.org/150/section.aspx/240.

INTERVIDA entiende la Educación para el Desarrollo como un proceso educativo constituido por discursos, saberes y prácticas –tanto en el ámbito formal como en el no formal e informal– que tienen como objetivo la concienciación crítica y el compromiso, la responsabilidad y la acción tanto individual como colectiva para promover un cambio que vaya del actual modelo de relaciones Norte-Sur, hacia un modelo basado en la justicia y la igualdad de oportunidades de participación social, política y económica, para todas las personas y pueblos del mundo.

Por lo tanto, la Educación para el Desarrollo va más allá de la sensibilización puntual, la captación de fondos o las políticas de marketing; representa una dimensión más profunda en un proceso que busca ahondar en el análisis y la comprensión de las causas de las relaciones desiguales entre Norte y Sur, predispone a la solidaridad, la cooperación y el cambio y, finalmente, centra sus esfuerzos en encontrar y desarrollar las acciones necesarias para este cambio. Se trata de acciones planificadas a medio y largo plazo que tienen como objetivo la transformación de los discursos, saberes y prácticas sobre esta temática de las personas a quienes se dirigen.

En esta línea, la Educación para el Desarrollo ha experimentado una importante evolución desde sus inicios hasta nuestros días, ligada a los cambios que han experimentado también los distintos modelos de cooperación y desarrollo. Actualmente, se relaciona con el nuevo papel sociopolítico que empiezan a defender algunas ONG que se justifican no tanto en términos de eficiencia técnica de los proyectos, sino como agentes sociales que fomentan una transformación de las relaciones Norte-Sur, que promocionan la concienciación, el compromiso y la responsabilidad social, que generan ‘cultura de solidaridad’ y que representan un contrapunto a las actuales políticas de globalización.

Ante esta perspectiva, INTERVIDA ha marcado una estrategia para que la Educación para el Desarrollo se convierta en uno de los pilares fundamentales de su labor, trabajando no sólo en los países ‘Norte’, sino también en el ‘Sur’  y dentro de la propia organización.

En los países Norte, además de seguir ofreciendo la revista y web SOL para niños y niñas sobre contenidos relacionados con la Educación para el Desarrollo de una forma lúdica, se va a trabajar hacia y con nuestros padrinos para que conozcan las realidades contra las que luchamos, y así fomentar cambios de actitud y movilización social que repercutan en una transformación global de las relaciones Norte-Sur, hacia un modelo más crítico, responsable y, sobre todo, justo. Por otro lado, se quiere poner a disposición de las escuelas recursos pedagógicos relacionados con la Educación para el Desarrollo; y, como organización, servir de plataforma para promocionar y fortalecer vínculos para fomentar el reconocimiento mutuo, el respeto y la tolerancia de la diversidad, y el intercambio de conocimientos y buenas prácticas en Educación para el Desarrollo. Además, se busca una apertura de INTERVIDA al exterior a través de la participación en espacios y redes más amplias de Educación para el Desarrollo junto con instituciones públicas y otras organizaciones del sector que actualmente también están trabajando en esta línea.

En los países en los que INTERVIDA está presente llevando a cabo proyectos de desarrollo, se continuará trabajando con las comunidades en la puesta en marcha y fortalecimiento de programas de sensibilización, de educación en derechos y valores y en la promoción de la capacitación profesional. Por último, se está educando y formando a los profesionales de INTERVIDA, tanto en el Norte como en el Sur para que lleven a cabo su tarea de la forma más eficiente posible.