Reconstrucción de escuelas en Nepal, “prioridad” para Plan Internacional
Hace ya dos años que se produjo el terremoto que devastó Nepal. 7.8 grados en la escala de Richter que terminaron con la vida de muchas personas y destruyeron grandes áreas del país. Cientos de infraestructuras quedaron dañadas, entre ellas colegios e institutos de enseñanza que privaron a los niños y adolescentes de continuar con su formación. 24 meses después Plan Internacional sigue poniendo la lupa en este aspecto, siempre comprometidos con los derechos de la infancia.
Poco a poco han ido volviendo a las clases algunos jóvenes, a esos centros que han podido reconstruirse ya. El proceso es muy lento y siguen en marcha numerosas acciones para devolver a la vida estas instituciones, que se están reformando y reconstruyendo. Unos 8.000 colegios quedaron derruidos y Plan Internacional intentó paliar el problema instalando escuelas temporales, hasta 326. Es así que unos 24.000 pequeños han podido volver a tener una formación digna.
Queda mucho por hacer, no cabe duda, por eso la organización hace un llamamiento a gobiernos y donantes para “que den prioridad a la educación y la protección de niños y niñas, para que puedan estudiar y desarrollarse en entornos seguros y colegios sismo resistentes”, explica Concha López, directora general de PI en España.
Plan Internacional ha destinado 27,7 millones de euros en los últimos años a apoyar a afectados por los terremotos ocurridos en territorio nepalí en el año 2015. Eso no quita que desde la ONG apunten que “la reconstrucción está lejos de haber terminado”. Consideran aún que hay áreas en zonas de difícil acceso a las que no se ha podido acceder, por ejemplo, con lo que ello supone de retraso en la reconstrucción de Nepal.
Plan Internacional ha construido 12 nuevos colegios inclusivos y accesibles para niños y niñas con discapacidad. Ha puesto en marcha instalaciones sismo resistentes y tiene previsto construir 10 escuelas más. En ellas los niños, las niñas y el personal educativo reciben formación para estar preparados ante desastres. Concha López apunta que “construir colegios no es solo proporcionar estructuras permanentes para la educación, es construir una cultura de seguridad y preparación ante desastres y asegurar que la comunidad se hace cargo de estas escuelas”.