Unicef busca soluciones para salvaguardar los derechos de niños refugiados y migrantes
Más de 150 expertos se han reunido en Madrid con el objetivo de que no se repitan las situaciones vividas por muchos niños víctimas de desplazamientos forzosos. Los pequeños refugiados son ya alrededor de 28 millones en todo el mundo. Se han visto en la necesidad de dejar sus casas y no se están respetando sus derechos fundamentales.
El encuentro que ha tenido lugar en la capital ha congregado a profesionales de organizaciones internacionales, de la sociedad civil y de distintos países de todo el mundo. La idea es trasladar recomendaciones para proteger a la infancia a las Naciones Unidas. La ONU está trabajando en estos momentos en un documento donde se analiza la situación de los niños y las migraciones, un trabajo que debe ser guía para gobiernos, políticos, jueces, fiscales, abogados, policías, empresas, médicos, profesores, medios de comunicación y por la sociedad en su conjunto. En Unicef destacan que la garantía de los derechos de los niños es responsabilidad de todos.
La realidad en relación a los infantes refugiados en el mundo es realmente compleja. Siria es el país con más niños refugiados, superando los 2.200.000.
Más de 100.000 pequeños han llegado este 2016 a Grecia, Italia, Bulgaria y España, aunque aún hay mucho por hacer al respecto. Los Estados no cumplen el compromiso adquirido con la UE para admitir a más personas desplazadas de sus países de origen. En la mayoría de los casos estos procedían de Siria, Afganistán, Irak, Eritrea, Nigeria y Gambia.
Las principales razones por las que estos chicos salen de sus casas es la guerra y los conflictos. También influyen las razones económicas y el acceso limitado a servicios básicos, aunque los primeros motivos son los de mayor peso. Cada vez hay más niños afectados por las migraciones internacionales. Muchos abandonan sus hogares solos o con sus familias buscando lugares donde estar protegidos. En no pocas ocasiones pasan la frontera siendo engañados y entrando en redes de trata de personas. También están aquellos que quieren unirse a sus familias que ya han salido del país.
Unicef anima a todo el mundo a colaborar con la organización para seguir luchando por los derechos de la infancia.
