Findus revoca los contratos con proveedores de pescado ilegal
En un espectáculo de poder del consumidor, el gigante de alimentos congelados Findus ha decidido parar la venta del pescado cazado ilegalmente tras darse a conocer en la televisión sueca sus negocios con la industria pescadera pirata. La organización Greenpeace, en colaboración con varios periodistas de Kalla Falta, un popular programa de televisión, mostró la ruta que seguía un pescado desde su caza ilegal en el Mar de Barentz hasta el plato de la cena del espectador. Tras este documental, se estima que la industria pescadera pirata representa alrededor del 30 por ciento del bacalao cogido en Mar de Barentz y el 40 por ciento del capturado en Mar Báltico.
En el documental se mostró como Findus, que produce una gama grande de productos de pescado populares congelados, se aprovisionaba de pescado ilegalmente capturado en el mar de Barentz. También quedaron plasmados los fuertes lazos entre Findus y empresas de marisco dudosas, entre las que se incluyen el mayor comerciante de pescado danés Kangamiut y la gigante China Pacific Andes, con presuntas conexiones con la pesca ilegal en los mares del Sur.
La mañana después de la emisión del documental, algunos activistas de Greenpeace escalaron por la fachada de la oficina central Internacional de Suecia de Findus para exigir un final a sus acuerdos de pescado ilegal. Los activistas dijeron a Findus que ellos deben garantizar que todos sus productos de pescado son capturados legalmente y no de reservas de pescado en peligro.
Findus no tardó en reaccionar a las demandas de los ecologistas y prometió romper sus contratos con los proveedores identificados de pescado ilegal (el gigante danés Kangamiut). También prometió contratar un auditor externo para repasar la política de aprovisionamiento de sus otros proveedores. La empresa también inició «una estrategia conjunta sueca» con la industria de pescado sueca para ayudar combatir la pesca ilegal.
Según el gobierno noruego aproximadamente 100,000 toneladas de bacalao son capturadas ilegalmente en el Mar de Barentz cada año. Las Naciones Unidas y la FAO dicen que más del 70 por ciento de las reservas de pescado son explotadas, sobreexplotadas o agotadas por los líderes comerciales. La industria pescadera ilegal es un problema grande y cada vez se hace más grande. Es por ello por lo que hay que tomar medidas eficaces.
