Abandono de las armas en Colombia, gran noticia en pro de los Derechos Humanos

Acaba de firmarse un acuerdo en La Habana por el cual las FARC-EP garantizan el cese del fuego y el abandono de las armas, una noticia que llega fruto de las negociaciones entre esta organización y el Gobierno Nacional. Entreculturas ha informado de tan importante noticia en su web, haciéndose eco de un enfrentamiento que llevan siguiendo mucho tiempo. Y es que la entidad se reunió en mayo con el director del Servicio Jesuita a Refugiados en Colombia, Mauricio García. Este explicaba cómo se ha podido llegar a este acuerdo gracias a la creación de un tipo de alianza especial contemplada en la Convención de Ginebra.

Esta se encuentra recogida en el Derecho Internacional Humanitario (DIH) y tiene como objetivo que las partes pongan todos sus recursos en línea con poner fin a cuestiones humanitarias que tienen que ver con este conflicto. El DIH se ha incluido también dentro del propio orden legislativo del país. ¿Qué supone este paso adelante? Pues que las FARC-EP aceptan, al menos en parte, a las instituciones estatales.

Entreculturas se ha manifestado muy feliz ante esta situación. No todos los días se puede decir que Colombia por fin ha firmado la paz. “Confiamos en que este trascendental acuerpo permita que el país alcance una paz con justicia social basada en los derechos humanos, la igualdad y la promoción de la ciudadanía”, han señalado en un comunicado.

La organización no quiere que este logro deje en el olvido otras metas pendientes que son de vital importancia. Entre ellas figuran desde la lucha contra el narcotráfico a la minería ilegal, la extorsión, el contrabando, la inestabilidad y otras muestras de violencia. En estos momentos no se debe dejar de lado a quienes más lo necesitan. Así lo explicaba en su momento Mauricio García: “Ahora más que nunca es el momento de apoyar a las poblaciones más vulnerables de Colombia”.

El acuerdo de cese del fuego en el país colombiano quedó aprobado el jueves 23 de junio. Al acto de presentación acudieron tanto el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, como el comandante de las FARC-EP, Timoleón Jiménez. Por parte de Cuba, Raúl Castro, y de Noruea el canciller Borge Brende.