inicio noticias Así está Omran, el niño símbolo de la guerra en Siria casi un año después

Así está Omran, el niño símbolo de la guerra en Siria casi un año después

En agosto 2016 la guerra de Siria cumplía más de cinco años y las imágenes de un niño anónimo herido en una ambulancia recorrieron el mundo. El vídeo fue distribuido por Aleppo Media Center, un grupo de activistas contrario al Gobierno sirio, tras un ataque provocado por las fuerzas rusas o sirias al hogar del pequeño en la ciudad de Alepo

El niño se llamaba, y llama, Omaran Daqneesh y cubierto de polvo, sangre y heridas recordó al mundo que la guerra en Siria continuaba. Ahora, casi un año después, hemos podido ver a Omran otra vez, pero con una sonrisa de oreja a oreja y recordando al mundo que gracias a la ayuda humanitaria se pueden cambiar muchas vidas de inocentes.

Un periodista del otro bando y cercano al régimen de El Asad ha publicado una entrevista con Omran. Las imágenes fueron colgadas en Facebook por la reportera Kinana Allouche y el padre del pequeño decía que han cambiado el nombre de su hijo para protegerle. Además, la familia ha asegurado que no quiere abandonar Siria y acusa a los rebeldes de intimidarles. Valerie Szybala, de la ONG Syria Institute, ha explicado a Reuters que hay pocas probabilidades de que la familia haya hablado libremente. El diario Verne informa que «Ahora están bajo control gubernamental y sabemos que es un gobierno que arresta y tortura a aquellos que se oponen de forma pública a él. Para mí, la situación parece sugerir que están probablemente coaccionados», según lo que explicó Szybala a la Fundación Thomson Reuters.

El primer corresponsal en contar la historia de Omran y hablar con los médicos antes de que la imagen diera la vuelta al mundo fue el periodista británico de The Telegraph en Oriente Medio, Raf Sanchez, Quien explicó este martes que la familia no ha querido atender ningún medio internacional que no sea cercano al régimen de El Asad.

En el las imágenes podemos ver a Omran con su padre y dos niños más. Su hermano mayor murió días después del ataque. Recordar que esa misma ocasión, el director ejecutivo de Unicef quiso aprovechar para pedir la misma empatía con el resto de menores afectados por el conflicto: «¿No podemos ofrecer esa misma empatía a los más de 100.000 niños que están también atrapados en el horror de Alepo? Todos ellos están padeciendo cosas que ningún niño debería sufrir, ni siquiera ver».