6.000 personas huyen de la violencia en la República Centroafricana
Los datos que ha dado a conocer la Agencia de la ONU para los Refugiados Acnur revela otro de los dramas que viven miles de personas en lugares como la República Centroafricana. Desde mediados de junio han sido 6.000 ciudadanos de esta zona las que han huído a Chad y Camerún, un éxodo que arrancó a mediados de junio.
El inicio del conflicto, según explica Acnur, está en los conflictos entre agricultores locales y pastores en el noroeste del país, en la región de Ouham Pende. Estos enfrentamientos son frecuentes todos los años, cuando los pastores empiezan a desplazarse buscando pastos adecuados para el ganado. Se han ido sucediendo asesinatos, secuestros, saqueos… Y es por ello que pusieron rumbo a estos dos países vecinos.
La mayoría de los que han huido son mujeres, niños y personas mayores, pero cada vez hay más hombres que también salen en busca de un lugar más tranquilo y de otras oportunidades. Acuna explica que más del 20% de estos refugiados son personas muy vulnerables que llegan con problemas de salud, muy débiles y con graves traumas psicológicos. A todos ellos hay que ayudarles con las medidas que mejor se adapten a sus situaciones.
Acnur y el gobierno del país trabajan para poder dar asistencia a quienes van llegando. Las personas se van rebuscando y se les proporcionan servicios básicos, alimentos, medicamentos, etc. Al final se trata de una situación de gravedad a la que se debe hacer frente de manera conjunta.
Acnur señala que el estallido de violencia se produjo hace apenas seis meses. Esto frustra las esperanzas de paz que había traído la elección de Faustino Archange Touadera como Presidente. Se esperaba que trajera el fin a un conflicto que había durado tres años y que parecía empezar a remitir.
La entidades lleva muchos años actuando en esta parte del mundo. Antes de la llegada de estas más de 6.000 personas, Acnur y los socios con los que colabora estaban ya dando asistencia a más de 67.000 refugiados centroafricanos. Teniendo en cuenta la gravedad del problema actual, han solicitado ayudas por valor de más de 225 millones de dólares para dar respuesta a las muchas necesidades acuciantes en la República Centroafricana.
